Archives March 2019

Red de apoyo profesional

Cuando alguien sufre un acontecimiento desafortunado, es más fácil de sobrellevar, resolver y superar si se cuenta con una red de apoyo emocional.

Esta red de apoyo pueden ser familia, amigos, conocidos, vecinos y hasta grupos de face. Y sí sirven. Todo mundo que haya tenido el infortunio de haber pasado por un mal día y haya podido recurrir a su círculo de soporte puede corroborarlo.

Pero, ¿Y las empresas? Yo no he escuchado de ninguna empresa que cuente con una red de apoyo similar al de las personas.

Imaginen que una máquina de su planta truena, los más obvios sustitutos serían la competencia. ¿Tendrían la confianza de acercarse y pedirles su ayuda?

Si alguna o algunas de sus personas clave llegaran a ausentarse, ¿en qué situación los deja? Crisis total y absoluta.

¿Con quién estaría bien formar esta red? ¿Competencia directa? ¿Servicios similares en otros mercados? El simple concepto, ¿Es factible implementar en el mundo empresarial?

Me encantaría escuchar sus opiniones…

Siente más, ama aún más.

Amar y sentir es lo que nos hace humanos.

Entre más ejercitamos nuestra capacidad de amar, más desarrollamos nuestra habilidad de entender.

Entender es una habilidad clave en el desarrollo de negocios.

Tanto hacia afuera, entendiendo a nuestros clientes podemos atenderlos mejor, haciendo que nuestro negocio tenga sentido. Como también hacia adentro, entendiendo a nuestros colaboradores podemos ofrecerles algo que sea relevante en su plan de vida y así lograr que hagan cosas extraordinarias por la empresa y los clientes.

El entendimiento genera amor y viceversa. En el juego de Ender, el protagonista, al tener el objetivo de entender a profundidad a sus enemigos, acababa amándolos.

Date la libertad y el compromiso de sentir más y amar más. Es rentable.

Propósito y supervivencia

El ser humano se ha impuesto a si mismo un nuevo salto evolutivo.

Las tecnologías exponenciales y los sistemas que ha desarrollado a lo largo de la era industrial están llegando a un punto de colisión. De este choque solo un lado va a sobrevivir y los momios están todos a favor de las TExp.
La vida lenta, de supervivencia, casi de pastoreo llega a un fin abrupto. Y esto nos obliga a esa evolución de pensamiento, emocional, intelectual y cultural.

La persona que no tenga un propósito perderá fuerza, impulso y dirección. La persona que no tenga una meta extraordinaria no podrá ser feliz en esta era extraordinaria. La persona que no tenga un propósito no vera razones para seguir luchando, buscando, reinventándose.

Si hay una cosa que las personas y las empresas deben buscar este año, como parte de su estrategia, es su propósito.

El día de la felicidad

Es, como mucho de lo que hablamos aquí, un método a seguir. Hay herramientas, tácticas, ejercicios y, lo mejor de todo, respaldado por ciencia.

La ciencia ha demostrado que meditar te hace más feliz; que ser agradecido te hace más feliz; que ejercitar tu cerebro para ver lo positivo te hace más feliz; que comprar experiencias en lugar de cosas te hace más feliz; que tener relaciones positivas con familia y amigos te hace más feliz; que tener un esquema mental positivo te lleva a funcionar mejor profesionalmente y generar mayores ingresos y no sufrir por carencias te hace más feliz.

¿Suena a mucha chamba? Lo es. Pero con las herramientas adecuadas se consiguen resultados casi asegurados.

La otra buena nueva es que también hay iniciativas que pueden implementarse en la empresa y desarrollar un ecosistema laboral positivo que propicie la felicidad en las personas.

Conclusión: en casi todos los casos, las personas tienen ahí el potencial para ser felices… sólo requiere chamba.

La riqueza del proceso

No hay algo que pueda asegurar resultados. Sin embargo, sí que puede evitar muchos dolores de cabeza.

Seguir un proceso definido puede ayudar a que los esfuerzos del equipo, así como la atención de los clientes se enfoquen en las actividades correctas. Si un proyecto es visto como una lista de ToDo’s, se corre el riesgo de ponerse a hacer cosas que no se necesitan en el momento presente.

Además, la ansiedad de tener resultados finales puede ser gestionada de mejor manera: saber que un diseño es un paso intermedio y no un producto final permite entender a los involucrados que un concepto se define por etapas y las autorizaciones son más fluidas.

Regresando al tema de que ninguna herramienta te asegura llegar a resultados correctos, contar con un proceso y puntos intermedios de control, permite corregir desviaciones de manera oportuna y no encontrarse con un resultado final que difiere totalmente de lo que estaba en mente de un cliente.

Asegúrate de tener pasos intermedios de revisiones y validaciones, así no tendrás que empezar de cero un producto terminado.

Vete al glaciar y déjate morir…

Existe un mito (aunque algunos no lo consideran un mito) que los Inuits, los eskimales, cuando llegan a una edad avanzada y ya no pueden producir más de lo que consumen, se van caminando hacia lo más desolado de su territorio y esperan ahí la muerte.

En nuestra posición, decir ya no puedo, ya a mi edad no puedo hacer algo nuevo, o simplemente decidir retirarse representa una sentencia de muerte. Casi como salir caminando al helado paraje de los Inuits.

Actualmente, empresas como @humanlongevity, @elevianinc o @celularity, están desarrollando tecnología para extender los años que una persona puede vivir, viviendo bien.

Pensar en una caducidad productiva es una de las principales causas que se correlacionan con la muerte. Es un cambio de esquema mental que parece indicarle a nuestro cuerpo que ya se puede preparar para abandonar esta vida.

Así de intenso y determinante para nuestro presente y futuro cercano es sostener esa intención de hacer algo grande. Contar con un propósito es el primer paso para mantener el motor encendido.

El auge de las suscripciones

Lo que viene primero a nuestra mente es Netflix. Han crecido de manera exponencial y ahora ya están produciendo contenidos rivalizando con el mismísimo Hollywood.

Pero el modelo de suscripción ha rebasado todas las fronteras de las industrias y ahora hay suscripción de productos para rasurar, vinos, cajas sorpresa (ya sé…) y hasta de compras y envíos con Amazon.

La diferenciación y ventajas que una suscripción ofrece viene de varios puntos: contenido exclusivo, premieres, trato vip, accesos exclusivos, personalización, concierge…etcétera.

Las ventajas de los usuarios o clientes son como lo mostré, pero ¿y qué de las ventajas para las empresas? Por mencionar algunos:

  • Lealtad con costo de abandono.
  • Compras con economías de escala.
  • Planeación en la producción permitiendo eliminar mermas.
  • Ingresos pagados por adelantado.
  • Escalabilidad basado en tecnología.
  • Generación de data relevante.

Así que si tu producto o servicio es sujeto de suscripción (que casi todo lo es), y no lo has hecho aún, ya te tardaste.

Conoce las expectativas

Una simple pregunta puede evitar muchísimos malos entendidos, tiempo y hasta clientes: ¿Qué esperas, o esperabas, obtener?

Cuando un cliente llega y te dice: “Esto no está funcionando” muchas veces ni siquiera sabe por qué no. Existe una posibilidad de que sea solamente un sentimiento o incluso una percepción equivocada.

Si es un sentimiento o una percepción, lo primero para poder corregir, es saber qué tenía en mente como resultado del producto o servicio. Ese es el primerísimo paso.

De ahí ya todo es más fácil: o se corrige para cubrir sus expectativas, o el cliente modifica sus expectativas con la nueva información, o de plano se termina la relación de negocios y cada quien sigue su camino.

Una cosa es segura: el cliente se sentirá escuchado y atendido. De facto, su nivel de satisfacción mejorará y se deja la puerta abierta a un entendimiento.

Un comentario final. Si el cliente estaba feliz con el servicio o producto, y de la noche a la mañana cambió de parecer, levanta la antena para ver quién fue el gran “consejero” que con sus opiniones hizo que tu cliente desviara su camino…A ese personaje hay que atenderlo también.

Diversificar sociedades

La diversificación de los riesgos normalmente se entiende por tener más de una fuente de recursos. Lo más común es pensar en muchos clientes para no depender solamente de uno. También viene la diversificación de producto, de servicio, de zona y hasta de negocios o industrias.

La última es la más deseable, ya que los ciclos naturales de una industria, si tenemos dos negocios en la misma, podrían acabar con los ingresos de nuestros negocios.

Por eso es mejor tener negocios en más de una industria.

Pero hay, para los empresarios de mypymes de alto valor, otra diversificación que muchas veces es subestimada: la diversificación de socios.

Cuando has tenido una alianza comercial o sociedad exitosa con alguien, es común pensar que si arrancan una nueva empresa las cosas saldrán igual de bien. Normalmente, éste no es el caso.

Las características que cada socio tiene, y que lo hicieron efectivo en un negocio, no necesariamente son replicables en otro. La nueva empresa es un animal totalmente distinto y lo más seguro es que se requieran otras capacidades y una mezcla nueva de habilidades.

Más allá, si en una empresa las cosas no salen bien y los ánimos se encienden, se pone en un riesgo aún mayor todas las sociedades en las cuales se comparten socios.

Se recomienda mucha cautela y mucha astucia para leer a las personas y determinar si los conocimientos y caracteres serán compatibles en el nuevo negocio.

Proyectos maratónicos

Que se prolongan, desgastan y dejan de ser rentables.

Los equipos se ciclan y pierden la motivación. El cliente se cansa y se sube en su macho. Pero es justo con estos proyectos con los cuales se separan los improvisados de los que la pasión y el compromiso los impulsa.

Puede parecer que no tiene sentido. Y de hecho, no hace sentido de negocio durante un período demasiado prolongado. Pero cuando se finalizan, los equipos se vuelven familia y los clientes se convierten en amigos.

El hecho de no haber abandonado el barco hace que el éxito sepa más dulce aún.

Hay que tener paciencia y determinación. Y entender que, cuando llega un proyecto de este tipo a nuestras manos será un dolor, será un parto, pero ahora cómo vamos a amar a ese chamaco.