Vetas de contenidos

Es mucho más interesante para las audiencias una historia real que una historia ficción tibia y mal estructurada.

Explotar la realidad despierta el morbo, sí, pero también hace que se busquen similitudes y diferencias.

Quienes identifican diferencias pueden despedirse, gracias, nos hacen un favor al autosegmentarse.

Pero quienes se identifican con similitudes, forman lazos mucho más fuertes con la marca.

De ahí el valor de capturar instantáneas de la cotidianidad de la empresa. En las juntas, en los pasillos, en la cafetería hay miles de conversaciones en las que se hablan cosas de interés y hasta dignas de desarrollo.

Todos los días se crean y destruyen nuevas vetas de oro en datos, frases y métodos propios de la cultura de una empresa. Es ahí donde deben ser capturados al vuelo.

Para eso, se debe tener la intención de identificar y documentar esas perlas efímeras.