El poder de los retos virales

Fear of missing out + necesidad de pertenencia + status + posibilidad de influenciar…

La mezcla de 4 poderosas fuerzas que moldean el comportamiento, hacen que un reto en redes sociales sea súper difícil de dejarlo pasar sin siquiera intentarlo por lo menos una vez:

FOMO: Fear Of Missing Out. Ese sentimiento que puedes reconocer con facebook al no poder checar el feed por muchas horas. ¿Qué tal que pasa algo y no lo veo? ¿Y si todos los han visto y yo no?

Necesidad de pertenencia. Cuando formamos parte de un grupo, y ese grupo hace cosas, tenemos que hacer esas cosas. Si no lo hacemos, corremos el riesgo de dejar de pertenecer, o por lo menos, ser un marginado del grupo.

Status. Cuando lo intentamos ya tenemos puntos con nuestro grupo social, pero, si logramos superar el reto, wow, ahí sí que ganamos muchos más puntos y escalamos en la jerarquía del grupo. Estaremos de moda, aunque sea un instante.

Posibilidad de influenciar. Hacer el reto nos abre la posibilidad de decirle a nuestros amigos que lo intenten. La presión social es más efectiva cuando el que ejerce la presión se ha legitimado.

Cada uno de esos puntos es una inyección de dopamina, oxitocina y adrenalina ente otros compuestos químicos que nuestro cerebro genera como recompensa. Ahora, júntalos todos y tienes una receta de influencia social y de comportamiento, altamente viralizable.

Dinos que piensas y sientes…

Vetas de contenidos

Es mucho más interesante para las audiencias una historia real que una historia ficción tibia y mal estructurada.

Explotar la realidad despierta el morbo, sí, pero también hace que se busquen similitudes y diferencias.

Quienes identifican diferencias pueden despedirse, gracias, nos hacen un favor al autosegmentarse.

Pero quienes se identifican con similitudes, forman lazos mucho más fuertes con la marca.

De ahí el valor de capturar instantáneas de la cotidianidad de la empresa. En las juntas, en los pasillos, en la cafetería hay miles de conversaciones en las que se hablan cosas de interés y hasta dignas de desarrollo.

Todos los días se crean y destruyen nuevas vetas de oro en datos, frases y métodos propios de la cultura de una empresa. Es ahí donde deben ser capturados al vuelo.

Para eso, se debe tener la intención de identificar y documentar esas perlas efímeras.

¿Cuál es la realidad?

¿Donde se encuentra la realidad? ¿Dentro o fuera del internet y las redes sociales?

Me parece que las redes son como el poder: no corrompen, sino que exponen el verdadero carácter de las personas.

La posibilidad de emitir comentarios y opiniones de personas, marcas, países, razas, productos…lo que sea, sin tener que hacerlo de frente y viendo a los ojos, le da a muchos el arrojo para decir cosas que, si estuvieran cara a cara con su receptor, no dirian.

Entonces, si en línea son quienes en verdad son, ¿cuál es la realidad?

El empresario y principalmente, quien hace marketing, debe empezar a considerar las reacciones, comentarios, sueños de la gente en redes con más cuidado. Aunque aún la línea que divide realidad de ficción no está bien definida, todo se documenta y es recordado.